Nació en Buenos Aires. Vive y trabaja en Río de Janeiro.
Estudió en la La Escuela Nacional de Bellas Artes Prilidiano Pueyrredón de Buenos Aires donde obtuvo un profesorado en pintura y escultura. Cuando terminó sus estudios viajó a Méjico y luego vivió entre los Estados Unidos y Buenos Aires, donde hizo muestras y pintó murales en colecciones particulares.
Gabriela Ezcurra, quien se enamoró de los pintores viajeros de los siglos pasados, como Rugendas y Martin Johnson Heade entre otros, fue Invitada a exponer en Bruselas, donde pintó las vasijas del Palacio de Versalles perdidas en los bosques americanos cargadas con sus flores, sus frutos y su fauna. Vivió en Italia por siete años, donde expuso sus pinturas en museos, espacios públicos y galerías de arte. También exhibió en Londres, intercalando su temporada en Europa con viajes a América Central y del Sur.
La naturaleza de países como Brasil, Venezuela, Colombia, Costa Rica, Perú, México, Guatemala, el norte de Argentina y el sur de Estados Unidos, fueron una fuente de inspiración, donde Gabriela hizo dibujos y fotos que serían la primera etapa de sus futuros cuadros. Una vez más en los Estados Unidos, Gabriela expone sus pinturas en Palm Beach y descubre la impactante variedad de flores de los jardines de la Florida.
Desde 2012 hasta 2014 residió en Uruguay, donde comienzó a hacer esculturas en cerámica. En 2015 Gabriela se traslada a Río de Janeiro donde vive actualmente encontrando su refugio y espacio ideal para desarrollar su trabajo dentro de la floresta urbana mayor del mundo.

Born in Buenos Aires. Lives and works in Rio de Janeiro.
Gabriela began her career as a painter at the Prilidiano Pueyrredón National School of Fine Arts in Buenos Aires where she obtained a faculty in painting and sculpture. When she finished her studies she traveled throughout the Mexican jungles painting and then lived between the New York and Buenos Aires, where she had many shows and painted murals in private collections.
Gabriela Ezcurra, who fell in love with the traveling painters of past centuries, such as Rugendas and Martin Johnson Heade among others, was invited to exhibit in Brussels, where she painted the vases of the Palace of Versailles lost in the American forests laden with their flowers, their fruits and their fauna. She lived in Italy for seven years, where she regularly exhibited her paintings in museums, public spaces and galleries.
She also has made several shows in London, interspersing her season in Europe with trips to Central and South America. The nature of countries such as Brazil, Venezuela, Colombia, Costa Rica, Peru, Mexico, Guatemala, northern Argentina and the southern United States, are a source of inspiration, where Gabriela makes drawings and photos that will become the first forms in her future paintings.
Once again in the United States in 2000, Gabriela exhibited her paintings in Palm Beach and discovered the impressive variety of flowers in the Florida gardens. From 2012 to 2014 she lived in Uruguay, where she began working on ceramic sculptures. Since 2015 Gabriela lives and works to Rio de Janeiro, having found her refuge and ideal space to develop her work, painting and sculpting in the midst of the largest urban forest in the world.